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El buque Ángeles Alvariño cancela la búsqueda de Anna y Tomás Gimeno. La autoridad judicial ha detallado en un informe con gráficos por qué es «imposible» continuar con las labores de búsqueda.
La titular de Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Santa Cruz de Tenerife considera «imposible» continuar con la búsqueda de Anna y Tomás Gimeno. Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, ha autorizado la marcha del buque oceanográfico Ángeles Alvariño.
Manuel Marlasca, jefe de Investigación, ha explicado a laSexta que no «queda duda» de que Tomás Gimeno se arrojó al mar, y que encontrarlo será casi misión imposible.
Ha sido el Tribunal Superior de Justicia quien ha detallado por qué el buque Ángeles Alvariño no puede continuar con las labores.
Entre las cuestiones técnicas que han llevado a paralizar el proceso por ser «ineficaz» para encontrar más pistas de las que ya han conseguido hallar, se encuentra el peligro para el propio robot de búsqueda.
Tras el hallazgo de la hermana mayor, Olivia, y dos botellas de oxígeno, ha cesado la búsqueda del presunto asesino de Anna y Olivia por la complejidad de hallar su cadáver.
Más allá de los 700 metros que han cubierto al 100% en la búsqueda de los desaparecidos, el terrero se vuelve muy escarpada. Es una zona crítica para poder operar con el sonar.
Las autoridades recalcan que lo más probable es que a Gimeno lo arrastrara la corriente. La longitud de la deriva se estima en 14 km y el avance de exploración del rov sería de una línea perpendicular por hora en las mejores zonas, lo que equivale a 20 metros de avance por hora.
Mantienen la hipótesis sobre el suicidio del padre usando la muerte dulce.
El buque zarpó el miércoles 30 de junio desde el puerto de Santa Cruz Tenerife rumbo a Cádiz dando por cancelada la búsqueda.
Anna y Olivia desaparecieron el 27 de abril, cuando se suponía que el padre debía entregar a las niñas a la madre según lo establecido cuando la pareja se separó.
C0n un barco huyó con la sniñas hacia el agua, donde, según las autoridades, las mató y después se suicidó. «Dadas las corrientes en el fondo, no se puede asegurar que un cuerpo lastrado con un cinturón de buceo no se desplazaría rodando pudiendo llegar a un lugar no determinado y, por tanto, fuera de la capacidad de búsqueda de que disponemos», indican.
El pitbull de grandes dimensiones que ha acabado con la vida de su dueño de 26 años será presumiblemente sacrificado tras lo sucedido.
El presunto asesino en serie queda con los hombres a través de apps de citas y posteriormente los droga para robarles en Bilbao.