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Juana Rivas ha salido este martes 15 de junio del Centro de Inserción Social (CIS) Matilde Cantos de Granada para cumplir condena en su casa con control telemático, según han informado a Efe fuentes penitenciarias.
Juana Rivas ingresó el pasado día 11 en ese CIS para cumplir la condena de dos años y medio de prisión que se le impuso por no haber entregado a sus hijos al padre en el verano de 2017.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias impuso el tercer grado y aplicó el artículo 86.4 del Reglamento Penitenciario, lo que supone cumplir la pena en casa con pulsera telemática. Se ha tenido en cuenta el ingreso voluntario de Rivas en el CIS, que la condena que se le impuso no era superior a cinco años, que se trata de su primer delito y que su causa tiene una antigüedad superior a tres años.
«Lógicamente valoramos muy positivamente esta decisión. Juana cumple todos los requisitos legales para poder disfrutar de este beneficio penitenciario», ha agregado, al tiempo que ha garantizado que seguirán «luchando para que Juana recupere a sus hijos a la mayor brevedad». Para ello seguirán impulsando la petición de indulto que formularon el pasado 4 de mayo y que aún está pendiente de resolución.
El Ministerio de Justicia ya ha iniciado su tramitación con la petición de informe al tribunal sentenciador.
Juana Rivas decidió en el verano de 2017 coger a sus hijos y marcharse a España. Ocultó durante días a los niños de su padre asegurando que era víctima de malos tratos. El apoyo entonces fue general e incluso la presidenta de la Junta en aquel momento, Susana Díaz, llegó a escribir: «Todo mi apoyo a Juana Rivas en su lucha para proteger a sus hijos. Los niños también son víctimas de la violencia machista».
Aun así, y sin denuncia por malos tratos contra Rivas o sus hijos por parte de Arcuri en Italia, la ocultación de los menores es lo que llevó a Rivas a la cárcel, después de que un juez la condenara por sustracción de menores.
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