Tras debates, el Ayuntamiento ha tomado la decisión de prohibir a la Policía Local de Valencia el uso de las mascarillas con bandera de España.
A los agentes de la Policía Local de Valencia les prohíben usar las mascarillas que lleven la bandera de España.
Policía de Valencia sin mascarillas con bandera
Así lo ha reportado el cuerpo de seguridad, la Policía Local de Valencia, no podrá hacer uso de las prendas de protección, como lo son las mascarillas, que tengan impuesta la bandera de España.
Así les prohíben que los trabajadores el uso de la insignia en su elemento de protección.
La prohibición sucederá durante la jornada laboral de los agentes. A cambio de las anteriores mascarillas, la Policía recibió una nueva adquisición; una mascarilla que tiene el logo de la Policía Nacional y no la bandera de España.
El elemento de seguridad, lo tendrán que portar siempre que estén trabajando para protegerse del coronavirus.
Las mascarillas anteriormente entregadas, se suministraron hace dos meses por el sindicato. Y ha sido el mismo representante del sindicado de Policías Locales en el Ayuntamiento de Valencia, Jesús Santo, quien ha dado detalles sobre el elemento de protección que será cancelado. Ante la petición de cambiar de logo, el representante se muestra bastante confundido, debido que en anteriores ocasiones ya se había aprobado la bandera.
«Los agentes utilizan las mascarillas del sindicado y otras compradas por ellos mismos, porque siempre se ha necesitado más elementos de protección. Ahora, nos sorprende que vengan a decirnos que tenemos problemas por el logo», expresa el representante.
Unas nuevas mascarillas
Al parecer, la orden de las autoridades va en que, no pueden portar mascarillas que no sean suministradas. Es decir, que durante su jornada laboral no pueden portar cualquier que ellos hayan decidido adquirir. Además, lo que manifiestan los agentes es que el porte de nuevas mascarillas es un gran cargo económico para el Ayuntamiento, que tendrá que tener presupuesto para catorce mascarillas por cada uno de los agentes. Generando así un gran dispendio que, al fin y al cabo, termina pagando el ciudadano.
Como era de esperarse, la actualización ha molestado a algunos agentes que, no entienden los motivos y los argumentos por los que deban sí o sí usar algo ya implementado.
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