Madrid prohíbe celebrar las campanadas en Puerta del Sol y demás plazas. El aforo de las calles más transitadas será controlado por los ayuntamientos.
Madrid prohíbe la celebración de las campanadas en Puerta del Sol y resto de plazas esta Nochevieja.
Madrid prohíbe las campanadas en Sol
Este año la Puerta del Sol permanecerá vacía durante las campanadas de Nochevieja. Madrid prohíbe la celebración tanto en Sol, como en plazas y espacios públicos, para prevenir la expansión de la Covid-19.
Además, los ayuntamientos deberán de controlar el aforo en las calles más transitadas durante la Navidad y la Cabalgata de Reyes. La Cabalgata se llevará a cabo en espacios acotados para ello, con un aforo reducido al 50%, donde el público permanecerá sentado.
Por otro lado, también se controlará el aforo en las visitas a belenes. Las medidas de distancia de seguridad en las colas se respetarán más que nunca. Solo podrá acceder a verlos la mitad de la capacidad habitual, en grupos de hasta seis personas. Antonio Zapatero, viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19 de la Comunidad de Madrid, ya ha anunciado en rueda de prensa que las medidas se darán a conocer mañana. Aunque ya hemos podido saber que no habrá celebración de Nochevieja y las Cabalgatas se desarrollarán en espacios acotados.
Apelar a la responsabilidad
Ya se inició cierta polémica durante el encendido de las luces en la capital. Pues se produjeron grandes aglomeraciones de personas, lo cual alertó a parte de la población dado el riesgo de contagio en las agrupaciones de este tipo. Por ello, es tan importante apelar a la concienciación ciudadana ya que el virus no está vencido y podría haber una tercera ola de coronavirus.
Ante todo prudencia, como la que ha pedido el Gobierno estos días a propósito de las reuniones familiares en Navidad. Unas Navidades que deberían celebrarse en casa y solo con los familiares más allegados, siempre y cuando no se supere el máximo establecido de 1o personas. Ante esta situación, todas las medidas son pocas. No habrá actividades recreativas de ningún tipo y aquellos titulares de alojamientos turísticos y rurales deberán hacerse responsables de controlar que no se formen agrupaciones de personas.