La Junta de Castilla y León aprueba un cierre perimetral para Aranda de Duero y Burgos, que comenzará el martes 20 de octubre.
Castilla y León pondrá en confinamiento a Burgos ante la expansión del coronavirus. Este lunes, 19 de octubre, a primera hora la consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha llamado al alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, para informarle de la decisión de implantar estas medidas de restricción en la capital.
Mañana martes, 20 de octubre, se publicará la orden en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl). El miércoles, 21, entrará en vigor el control de entradas y salidas y otras restricciones de aforo. Así lo ha confirmado De la Rosa en rueda de prensa esta mañana.
Situación de Burgos
Este fin de semana, Burgos ha alcanzado el tercer requisito para el cierre perimetral: tiene una incidencia acumulada de 559 casos por cada 100.000 habitantes. Además, registra una positividad del 29% en los últimos 14 días y los pacientes de UCI en Castilla y León ocupan el 64% de las camas de críticos pre-COVID. La medida se toma casi dos semanas después del confinamiento decretado para León, San Andrés del Rabanedo y Palencia.
La provincia de Burgos ya había adaptado nuevas medidas este fin de semana. Desde entonces, no se puede consumir de pie o en la barra en bares, cafeterías y restaurantes. Solo en mesas y grupos de mesas, pero sin que las reuniones superen los seis miembros. También queda prohibido fumar en terrazas y veladores, y los establecimientos deberán mantener las limitaciones de aforo en el interior: al 75% si no se superan los 40 comensales, y hasta el 50% si la cifra es mayor a estos 40 comensales.
Aranda del Duero, tercera vez confinada
Además del confinamiento en Burgos, la Junta de Castilla y León cierra de nuevo Aranda de Duero tras detectar transmisión comunitaria, según acaba de publicar el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl). El cierre perimetral comienza a las 00.00 horas de este 20 de octubre de 2020 y mantendrá su eficacia durante 14 días naturales, que podrá prorrogarse si así lo requiriese la evolución de la situación epidemiológica. Aranda ya estuvo confinada entre el 7 y el 21 de agosto ante la elevada tasa de incidencia.