La Universidad Complutense de Madrid anuncia que la Comunidad de Madrid se ha puesto en contacto con ellos para buscar rastreadores voluntarios.
Los rastreadores son un arma fundamental para frenar la expansión del coronavirus. Su trabajo está considerado como esencial y es clave para que no haya segundas oleadas. La Universidad Complutense de Madrid anunció este lunes, mediante un comunicado firmado por el rector, Joaquín Goyache, que la Comunidad de Madrid ante el aumento de casos y la falta de personal, se había puesto en contacto con ellos para buscar voluntarios.
Madrid: rastreadores «voluntarios»
En él se especificó que, ante la previsión de que se siga produciendo un aumento de casos en la Comunidad de Madrid, se buscaban graduados de diferentes carreras relacionadas con la sanidad, trabajo social o la biología para incorporarse al equipo de rastreadores en Madrid.
“Conocedores de nuestra disposición a ayudar, tal y como se demostró durante el estado de alarma, desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid nos ofrecen la posibilidad de poder seguir colaborando, como van a hacer con otras entidades, a través de un llamamiento a licenciados/graduados en Biología, Enfermería, Farmacia, Medicina, Psicología, Trabajo Social o Veterinaria que estuvieran dispuestos, previa formación necesaria que sería impartida por la CAM, a participar voluntariamente como rastreadores de contactos estrechos de COVID-19”, indica en el comunicado emitido por la UCM.
Además, la universidad ha advertido que “los seleccionados que estén en la bolsa de trabajo de la CAM o inscritos en el paro con demanda de empleo podrían ser contratados”. El carácter voluntario de este llamamiento ha desatado la polémica en las redes sociales, donde se ha criticado duramente. “Como alumno de la UCM quiero dejar claro lo insultado que me siento con esta ocurrencia. Pedís jóvenes trabajando gratis que os ayuden a cubrir vuestra incompetencia”, ha escrito un usuario de Twitter.
“Vergonzoso que lo publiquéis, humillante como tratáis a los jóvenes y un desprecio a los profesionales que no se contratan. La primera ola pilló por sorpresa, pero en esta ocasión es inadmisible que pidáis voluntarios tras meses para contratar a gente”, añade otro internauta.