Un crucero de 400 tripulantes ha solicitado la entrada en el puerto de Barcelona ante la presencia de una persona con leve sintomatología compatible con el Coronavirus. Todos los demás tripulantes siguen a bordo y en cuarentena, y ninguno muestra sintomatología.
Ante esta petición, y dado que los cruceros tienen prohibida la entrada en puertos españoles desde la declaración del estado de alarma,
Sanidad Exterior ha enviado una autorización de “excepcionalidad” para proceder al desembarco de este tripulante. Esta persona, que ha dado positivo en un test de Covid-19, se encuentra a bordo del barco, aislada y con sintomatología leve.
El Ejecutivo ha explicado que la Comisión Europea, en una comunicación del 13 de mayo, señala que “los brotes previos de Covid-19 en buques de crucero han puesto de manifiesto la especial vulnerabilidad de los entornos cerrados durante los viajes largos. Antes de que las embarcaciones de crucero reanuden sus operaciones, los buques deben establecer procedimientos estrictos para reducir el riesgo de contagio a bordo y proporcionar asistencia médica adecuad en caso de contagio”.
El Gobierno apunta que la “todavía compleja situación y la naturaleza imprevisible de su evolución” desaconsejan el levantamiento de la restricción de entrada de cruceros a puertos españoles mientras que los operadores no establezcan procedimientos “estrictos” para evitar contagios tanto a bordo como en aquellos puertos en los que puedan detenerse para que la tripulación reciba tratamiento médico y puedan llevarse a cabo las repatriaciones necesarias.
La orden de Transportes tampoco permite recalar en puerto español a los buques y embarcaciones de recreo extranjeras que no tengan su puerto de estancia en España, salvo las que entren solamente con tripulación profesional a bordo.
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