El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado que “las clases vuelven en septiembre salvo algunas excepciones para reabrir centros educativos con tres propósitos: actividades de refuerzo, garantizar que los niños menores de seis años puedan acudir a los centros en el caso de que ambos padres tengan que trabajar presencialmente y para celebrar la EVAU (Evaluación de Acceso a la Universidad)”.
También se aclaró que podrían acudir estudiantes vulnerables de primaria para recibir refuerzo educativo.
En la fase uno del plan de desescalada los equipos directivos irán incorporándose a sus centros a finales de mayo, preparando las incorporaciones a las aulas y asegurándose de la correcta desinfección y acondicionamiento y del trabajo administrativo y preparatorio de los docentes. En la fase dos, a partir del 25 de mayo, se abrirán también para los alumnos especialmente vulnerables de cualquier curso, “un 10 o 12% de los estudiantes”, ha confirmado la portavoz del ministerio.
Serán los profesores quienes decidan qué alumnos pueden regresar, y se harán siguiendo las medidas de seguridad recomendadas. También se admitirá a los niños menores de seis años cuyos dos padres acrediten que no pueden teletrabajar y se abrirán los centros de educación especial. La ministra Isabel Celaá se muestra confiada en una vuelta progresiva a finales de mayo o principios de junio, recalcando que los primeros en retornar serían los alumnos de 2º de Bachillerato, con el fin de tener “unas semanas de refuerzo” antes de la EVAU, retrasada al 10 de julio.
Los ocho especialistas de la Asociación Española de Pediatría que asesoran al Gobierno habían aconsejado al Ejecutivo que el regreso a los centros se produjese en septiembre, ya que la comunidad médica cree que es muy complicado para los centros controlar que los menores de edad cumplan las medidas higiénicas y de distanciamiento social, y critican la precipitación. “El problema es que se están tomando las decisiones con el método ensayo-error ya que no tenemos datos suficientes”, se lamentan.
Por otro lado, Leticia Cardenal, presidenta de la Confederación de AMPAS (Ceapa), explica que su institución “respeta las normas que los expertos sanitarios decidan”, pero reclama que el retorno de los alumnos no se limite a la enseñanza infantil. “Necesitamos volver a trabajar y que nos ayuden a articular alguna medida de conciliación”, sostiene.
En Italia, su Gobierno decretó que sus escolares no volverán a clase hasta septiembre, y dedicarán el principio del curso a que los alumnos se pongan al día. La Selectividad italiana se celebrará de forma oral y online. En Alemania han trazado una ruta ambigua y desigual que dependerá del grado de incidencia de la pandemia en cada territorio. Portugal reabre sus escuelas infantiles en junio y las escuelas de secundaria el 18 de mayo. El plan no incluye las escuelas de primaria.
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