Los datos de las defunciones registradas en la Comunidad de Madrid reflejan un aumento de la mortalidad sin explicación de unas 3.000 muertes.
Sanidad defiende que para dar la cifra de fallecidos sólo se cuenta a los que han sido testeados. Los datos de las defunciones registradas en la Comunidad de Madrid en la segunda quincena de marzo reflejan un aumento de la mortalidad sin explicación de unas 3.000 muertes.
Los jueces de los registros civiles de Madrid firmaron 9.007 licencias de enterramiento, según los datos difundidos este martes por el Tribunal Superior de Justicia.
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Coronavirus, los datos de entierros en Madrid
Esto supone más del doble de las muertes registradas durante todo el mes de marzo del año pasado, 4.125 según el Instituto Nacional de Estadística (INE). A partir del dato mensual se puede estimar una media de 133 muertes diarias en marzo de 2019, lo que supone una cifra de 2.394 entre el 14 y el 31 de marzo del año pasado. Es decir, este año se han producido en la Comunidad de Madrid 6.613 fallecimientos más que el mismo período del año anterior. Esta cifra es muy superior a las muertes oficiales por Coronavirus, que es de 3.439.
Esto se debe a que el Ministerio de Sanidad pide a las comunidades que le comuniquen sus cifras de fallecidos confirmados por Covid-19, es decir, tan sólo los casos que han sido confirmados mediante un test diagnóstico. Por desgracia, excluye a todos los fallecidos en residencias de mayores que no llegaron a ingresar en un hospital y a las personas que murieron en sus domicilios sin que se les hicieran la prueba. En estos casos, la causa de la muerte que aparece en el certificado de defunción es la parada cardiorrespiratoria o la insuficiencia respiratoria.
El dato de Madrid conocido este martes y desvelado ayer por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha confirman lo que han detectado los informes sobre el exceso de mortalidad que publica el Instituto de Salud Carlos III, que también se basa en los certificados de defunción de los registros civiles. Según el último informe, actualizado a 6 de abril, en España hubo un 51,2% mas de muertes esperadas entre el 17 de marzo y el 6 de abril.
Ciertamente, por ahora no se pueden atribuir estos excesos de mortalidad directamente a una sola causa, como sería el infradiagnóstico de Covid-19. Puede haber otras, como que el sistema sanitario esté colapsado y no pueda atender correctamente a algunas personas o que se haya producido lo que los epidemiólogos llaman “efecto cosecha”, en el que las defunciones de personas con salud más deteriorada se hayan adelantado unos meses.
Los informes del Instituto Carlos III alertan que los datos de defunciones observadas son provisionales, pues el retraso entre la fecha de defunción y la de notificación se están incrementando debido al desbordamiento de los registros civiles. Los registros están saturados y las defunciones tardan en incorporarse a las estadísticas. Para poder atender todas las solicitudes, el Ministerio de Justicia ordenó la ampliación del horario en los registros de toda España, que ahora funcionan todos los días (incluidos fines de semana) en horario de mañana y tarde.
