Utilizar los códigos QR para pedir en locales es sencillo a su vez, la herramienta Omenu, es la más utilizada para crearlos.
La pandemia llevó a que los dueños de establecimientos como bares o restaurantes tomaran medidas sanitarias para continuar trabajando. Por este motivo, es que ahora es normal toparse con una carta virtual en lugar de la tradicional. Y, esto se debe a la incorporación de la tecnología a través de los códigos QR.
A través de plataformas digitales es diseñada la carta y, para ser visible el cliente deberá escanear un código QR con su dispositivo móvil y éste lo enlaza con el menú.
¿Por qué se debe utilizar el código QR?
Aparte de ser exigido como nueva medida sanitaria desde el confinamiento, los códigos QR han sido utilizados desde hace varios años; éstos fueron creados en 1994 por Denso Wave. Los códigos QR son lo más famosos de lo códigos de barra 2D. Hasta 2010 debido al auge y aceptación en Asia, se expandió su uso a América y posteriormente Europa. Ahora es común encontrar los código QR en menús, como acceso a ciertas páginas web e incluso para identificar compañías o ingresar a plataformas de mensajería instantánea.
Existen varias modalidades de hacer, no obstante, la herramienta Omenu, tiene fácil acceso, permite actualizar y diseñar la carta según lo desea el dueño del establecimiento. Algo a favor que tiene Omenu es que su registro es gratuito y su plataforma es fácil de utilizar.
Sumado a esto, encontramos que no se debe ser un experto en sistemas para dominar la plataforma, esta se encarga de guiar paso a paso al usuario. La plataforma no comisiona por ingresos a través de los códigos. No obstante, recomienda sus servicios para tener de manera impresa algunos diseños con el código en aras de tener un atractivo armonioso en la estética del establecimiento.
Cómo se usa
La forma de utilizar los códigos QR es sencilla. Basta con que el cliente escanee el código, para esto, el cliente deberá apuntar con la cámara de su móvil o tener un lector de códigos QR. Luego será redirigido a la carta que diseñó el dueño o encargado del establecimiento. Con esta modalidad, se reduce el contacto con objetos en establecimientos públicos y se agiliza el proceso de atención en tiempos donde se ha reducido la tasa de empleo en el sector bares y restaurantes.