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La empresa californiana Gateway Foundation publicó sus planes para el 2027, construir el Voyager Station, el primer hotel espacial.
Hace ya dos años, Gateway Foundation anunció por primera vez el proyecto de construir un hotel espacial.
El plan, antes llamado Estación Von Braun, consistía en 24 módulos conectados por huecos de ascensor. Estos módulos unidos formarían una rueda giratoria que estaría constantemente orbitando la tierra.
Ahora, el nombre del proyecto se ha modificado. Tomará por nombre «Voyager Station» y estarán encargados de su construcción los trabajadores de Orbital Assembly Corporation.
Esta empresa, es una nueva corporación fundada por Jon Blincow; mismo presidente de Gateway Foundation. Si bien, con toda la contingencia del COVID-19 se han retrasado un poco los planes, Blincow asegura que sigue firme la idea.
En entrevistas, el jefe del proyecto, ha hablado de que dentro de sus planes estaría empezar la construcción para 2026. Además, también afirma que para 2027 ya podría ser posible la primera estadía en el hotel espacial.
Blincow siempre ha sido un entusiasta de la carrera espacial. Afirmó en una entrevista «Estamos tratando de hacer que el público se dé cuenta de que esta era dorada de los viajes espaciales está a la vuelta de la esquina. Está llegando. Está llegando rápido«.
Aún no se han dado muchos detalles, pero sí se publicaron unas primeras imágenes de lo que se espera llegue a ser el Voyager Station. A primera vista no es muy distinto a un hotel de lujo y de alto precio en cualquier parte del mundo, a excepción de una peculiar y especial vista por la ventana.
Tim Alatorre, arquitecto de diseño de Orbital Assembly Corporation, habló que la estética para el Voyager es una respuesta a la estética creada en la película del aclamado director Stanley Kubrick; 2001: una odisea al espacio. Refiriéndose a dicha película, que es de gran culto en el mundo, la definió como «casi un plan de lo que no se debe hacer».
También afirmó que «Creo que el objetivo de Stanley Kubrick era resaltar la división entre tecnología y humanidad, por lo que, a propósito, hizo que las estaciones y las naves fueran muy estériles, limpias y extrañas». Por esto mismo, es que la estructura y estética de su hotel buscarían no acentuar esa división. Alatorre y su equipo quisieran llevar un trozo de la tierra al espacio, las comodidades de cálidas suites y elegantes espacios. Los huéspedes podrán disfrutar de sus camas y duchas tradicionales, aún estando en el espacio.
Esto no quiere decir que el diseño no aprovechará la novedad de estar en el espacio. Se planea también brindar la experiencia del viaje al espacio, con comida de astronauta como el helado liofilizado. También con actividades recreativas que permitirán recordar que estás en el espacio, en palabras de Alatorre «resaltan el hecho de que puedes hacer cosas que no puedes hacer en la Tierra».
Además añadió
«Debido a la ingravidez y la gravedad reducida, podrás saltar más alto, podrás levantar cosas, podrás correr de maneras que no puedes en la Tierra».
Dentro de los planes de Alatorre, no está únicamente la estética del hotel; sino también su funcionamiento. Toda la física que va detrás de una estación espacial que orbita la tierra. Según el arquitecto, la rueda giratoria funcionaría de tal manera que crearía una gravedad simulada.
«La estación gira, empujando el contenido de la estación hacia el perímetro de la estación, de la misma manera que se puede hacer girar un balde de agua sin regarla: el agua sale dentro del balde y permanece en su lugar».
Más hacia el centro de la estación no existe una gravedad artificial, pero a medida que se avanza por el exterior la sensación de gravedad aumentaría.
Gran inspiración surgió de Wernher Von Braun, un ingeniero aeroespacial pionero de la tecnología de cohetes en Alemania y Estados Unidos. Si bien al inicio se planteó llamarla en su honor, hubo controversia debido a acciones de Von Braun en vida. Cuando aún vivía en Alemania participó en el programa nazi de desarrollo de cohetes.
Alatorre se refirió sobre ello «La estación no se trata realmente de él. Se basa en su diseño y nos gustan sus contribuciones a la ciencia y el espacio (…) Pero ya sabes, Voyager Station es mucho más que eso. Es el material en el futuro. Y queremos un nombre que no tenga esos adjuntos».
Si bien es el más avanzado, no es el único plan turístico al espacio. Empresas como Virgin Galactic o SpaceX buscan también hacer del espacio un entorno para el turismo. De hecho, el sistema Starship de SpaceX podría ayudar al despegue de la Voyager Station.
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