Continúo con la segunda parte de los momentos más memorables de las aventuras gráficas de ayer y siempre (sólo falta que salga Raphael a pegar berridos después de esta expresión).
Esta vez, cómo no, los 5 mejores momentos están dedicados a la eterna competidora de Lucasarts en esos tiempos, Sierra, que nos brindó algunas sagas como King’s Quest, Space Quest o el genial Larry.
Disfrutad, y procurad no derramar ninguna lágrima sobre el teclado.
Por cierto, animo a que todos los que penséis que cualquier tiempo pasado fue mejor (por dios, sólo me falta la boina para parecer Paco Martinez Soria), dejéis vuestras sugerencias para mi próximo Top 10.
¿No se os ocurre nada? Tal vez lo que encontréis después del salto os refresque la memoria…Space Quest V – Mil maneras de morir: Como ya os comentaba en el caso del árbol de goma, las aventuras gráficas de Sierra se caracterizaban por ser algo más estrictas en el tema de morir.
Vamos, que si no vigilabas se terminaba el juego cada cinco segundos.
Observad…King’s Quest – Mil maneras de morir (2): Si pensáis que Roger Wilco lo tenía difícil, esperad a ver a nuestro pobre rey Graham sufriendo las mil y una.
Realmente venían ganas de ir a la carpeta del juego y escribir del *.
*Leisure Suit Larry – No es oro todo lo que reluce… : Sí, lo se, en este caso he seleccionado un video de la última entrega de Larry.
Concretamente pertenece a la octava parte (o séptima, para los más puritanos), pero sin duda esta secuencia mantiene el espíritu más descarado de la saga.
Gabriel Knight – La pesadilla: No penséis que todo son chistes y personajes estrafalarios.
Esta saga fue un giro que Sierra dedicó a aquellos jugadores que habíamos crecido con sus aventuras.
Sólo jugué a la primera parte, y me pareció una aventura gráfica magnífica.
Space Quest – Latex Babes of Estros: Volviendo a Roger Wilco, la cuarta parte es para mí la mejor de todas.
Viajes en el tiempo, alienígenas, centros comerciales en el espacio, chicas con poca ropa… … … ¿eh? ¿qué? Mmmm nada, nada.
Espero que os hayáis divertido tanto como yo recordando estos entrañables momentos.
Voy a ver si encuentro una disquetera de 5 y 1/4 en el mercadillo de mi barrio…