O debería llamarle no-juego.
Las propuestas de Nintendo como WiiFit o Cocina Conmigo no dejan de ser meras aplicaciones que salen en formato físico para consolas, no videojuegos como tal.
El primero es como un programa interactivo para ponerse en forma, pero de los de teletienda, de esos que luego no dan ningún tipo de resultado.
Y el segundo es un recetario, ni más ni menos.
Que no está mal que lancen este tipo de productos, pero sería mucho mejor si no lo estuvieran convirtiendo en su principal arma.
Entonces es cuando llega el Vitality Sensor en el pasado E3 y nos deja a todos con cara de bobos.
Un accesorio de este estilo iba destinado sí o sí a una nueva aplicación no-juego pero que nos intentarán vender como tal.
En foros mucha gente planteaba posibles ideas para el aparato, como usarlo para juegos de terror que detecten el grado de tensión del jugador.
Pero ahora en serio, ¿alguien se imagina jugando con esto? yo, desde luego, no.
Pero el presidente de Nintendo sigue insistiendo en lanzar algo que debería haber quedado en una broma.
Queremos lanzar el producto no más tarde del siguiente año 2010.
Estamos realizando algunas pruebas internas en Nintendo y encontrando patrones entre nuestros empleados, como los nervios inevitables de que el fin de semana se acerca o viceversa.
Viendo esto, se puede visualizar cómo están esperando el fin de semana.
Y también ver patrones completamente distintos en cada individuo – Satoru Iwata (traducción libre)En Nintendo están planeando lanzar el Vitality Sensor junto a un juego de relajación enfocada a la gente muy ocupada.
Así será posible visualizar tu estado al llegar a casa después de una larga jornada de trabajo y ver en pantalla cómo tu cuerpo se relaja.
Nosotros quizá no le encontremos la gracia, pero para el señor Iwata está muy clara.
Y es que cuando le preguntan por las ventas que esperan del producto, asegura que albergan ciertas dudas pero que esperan un impacto en la sociedad similar al fenómeno Wii Fit.
No es que asuste quedarse sin juegos de verdad, lo que da miedo es que Nintendo se pase al lado oscuro y se olvide de sus franquicias propias, que eso sí sería una dolorosa pérdida para el sector.
Vía