A finales del mes pasado llegaba por fin Crystal Defenders a la Store de PlayStation 3, una compilación de tres juegos que ya salieron anteriormente para móviles y que se dividen en W1, W2 y W3.
Mi consejo es ir por orden, puesto que al ser originalmente juegos separados por el tiempo, la evolución se nota bastante entre ellos.
Antes de ponerse con este título que he visto menospreciado por alguna gente, hay que tener muy en cuenta que se trata de un tower defense.
Si no te gusta el género, lógicamente, no hay nada que hacer.
Lo que nos ha gustadoLa jugabilidad.
Obviamente, y como conlleva todo juego del estilo, la palabra que siempre llevan implícita es: adicción.
Dan igual los gráficos o los bugs (en este caso no hay ninguno) que pueda tener un tower defense, vician de forma descarada.
Las unidades.
En W1 contamos con hasta 8 unidades distintas, pero es que al empezar el W2 te das cuenta de que no sólo te han cambiado alguna unidad o te han añadido una nueva, es que ahora además hay cristales que pueden potenciar fuerza, velocidad y alcance.
Al llegar a la W3 vuelve a haber ciertos cambios y además se nota una pequeña mejora gráfica del conjunto.
Las invocaciones.
Se pueden usar durante una wave pero al cambio cuestan 5 cristales, menos los Chocobo de la W3 que son sólo 2 cristales, aunque no merecen la pena porque apenas hacen daño.
Algunas sirven para potenciar el equipo al doble y hacer más lento al enemigo, otras les quita la resistencia y luego están las típicas que dañan gravemente a la wave.
La dificultad: Endiablada en algunas fases que te hacen repetirlas una y otra vez con distintas estrategias hasta que encuentras la correcta.
Pero sinó, ¿dónde estaría la diversión?El modo jugada perfecta.
A medida que completas fases, en el menú principal se desbloquean muestras de cómo hacer una jugada perfecta en cada nivel.
Aunque claro, sólo te muestran las 15 primeras waves.
Recomiendo verse el del primer nivel para ver qué estilo de juego te pide el Crystal Defenders y ya está.
Luego pierde la gracia si copias de las ayudas.
Lo que no nos ha gustadoLa dificultad.
¿Otra vez? Sí, porque al tratarse de juegos distintos en un principio, las últimas pantallas de la W3 no son el desafío extremo que puedes esperar si no caes en el dato.
Igualmente, la W2 era más fácil que la W1.
Las waves.
Sudé sangre para pasarme la segunda fase de la W3, pero los señores de Square-Enix no se mataron demasiado, así que las waves son exactamente iguales en todas las fases, lo que se añade a cada una son obstáculos en pantalla que impiden el alcance a distancia o múltiples caminos para el enemigo.
Cuando conseguí dominar esta segunda fase, la tercera y cuarta cayeron del tirón con la misma estrategia.
Una pena.