Lo del videojuego de Kick–Ass es para revolcarse por el suelo de la risa. O del dolor, vaya. Mientras que el cómic tiene material suficiente como para llenar cuatro o cinco videojuegos él solo, algún avispado decidió hacer una adaptación de la película (con cinemáticas con el dibujo de John Romita Jr) que tuviera las voces de todos los actores… excepto de Nicolas Cage.
Podéis comprarlo en la PSN por 15 euros. Antes de deshaceros de 2500 pesetas de las de antes, os aconsejaría mirar estos diez primeros minutos.Y es que Kick–Ass es como Marvel Ultimate Alliance pero sin su carisma, sin su cuidada estrategia, sin sus personajes desbloqueables… y, qué demonios, ¡solo con tres personajes jugables! Kick–Ass, Hit Girl y Big Daddy serán tus posibles personajes que lucharán en pareja contra el crimen.
¿Tanto les costaba haber metido a Red Mist, o a alguno de los superhéroes secundarios del cómic? Esto es, simplemente, patético.Y además, después de ver estos primeros minutos de juego, podemos afirmar que es aburrido y confuso. Kick–Ass tiene, al contrario que su fabuloso cómic, la gracia de un zapato. Por no hablar de los gráficos, que parecen realizados por un estudiante de primer año de informática. ¿Interesante? Depende de lo mucho que te guste donar dinero a causas perdidas. PUBLICIDADPUBLICIDADLeer más sobre Kick-AssVía