De pequeño nunca me dejaron tener videoconsola en casa. Es por ello que, cuando jugaba a un Super Mario cualquiera me obsesionaba e iba dando botes por la calle, imaginando que estaba en la realidad donde no podía estar en la ficción.
Siempre fui un niño raro. Ahora, Internet me ha escuchado y me ha demostrado que no estaba tan mal de la cabeza con una galería de videojuegos llevados a la vida real.Atentos, porque la cosa merece la pena: Estamos hablando de muñecos pixelados en lugares reales, no en emular los gráficos hiper-realistas de hoy en día (¿qué mérito tendría esto?).
Cosas como Mario Kart en una playa, Link avistando unas largas praderas que bien podrían ser las de Hyrule, Honda destrozando un coche o Ecco the Dolphin apareciendo en mitad del mar. Desde luego, la expresión “los videojuegos forman parte de nuestra vida” nunca cobró tanto sentido. Sin lugar a dudas, unos fotomontajes brutales. Bravo, Internet. Videojuegos en la vida realVía