Mientras muchos esperamos que PlayStation Network se restablezca en España (que ya va siendo hora, por cierto), Sony ya está pensando en qué hacer para vengarse legalmente del grupo de hackers que robaron los datos de los usuarios, incluyendo la tarjeta de crédito.
Para ello han escrito varias respuestas aclaratorias sobre lo sucedido.Aunque las respuestas van dirigidas al Congreso de los EEUU, lo cierto es que también nos dan respuestas a nosotros. Primero, Sony reconoce haber sido víctima de un ataque cuidadosamente planeado, muy profesional y altamente sofisticado.
¿Y quiénes son los culpables del ataque a PlayStation Network? Pues, según Sony… los que os estáis imaginando.Y es que se ha descubierto que los intrusos han puesto un archivo en uno de los servidores de Sony Online Entertainment llamado Anonymous. Dentro de él, solo una frase, We Are Legion, representativa de este grupo (que, al ser tan amplio y libre, cada vez cae más a la deriva y se enfrenta a sí mismo, como prueba que la propia organización negara ser responsable de los ataques). Esto resuelve una de las grandes dudas del ataque, pero… ¿Qué ha pasado con nuestras tarjetas de crédito? ¿Hicimos bien en cancelarlas?Pues sí y no. Sí porque podría haber pasado cualquier cosa, pero no porque, según Sony, no se han detectado transacciones fraudulentas. Los que no cancelarais vuestra tarjeta de crédito podéis respirar tranquilos. Los demás, bueno, supongo que aún estamos esperando la nueva tarjeta. ¡Gracias, Anonymous!Por lo demás, lo que os imagináis: Se ha incrementado la seguridad (¡solo faltaba!), se ha puesto como prioridad proteger nuestros datos personales, etcétera. Aún nos quedan muchos episodios por ver de este culebrón… y os prometo que no puedo esperar al próximo movimiento. ¡Que alguien traiga palomitas!Vía
Aunque muchos han usado Google Forms, otros no tienen conocimiento de su uso. Por eso acá explicamos qué es y cómo es su uso adecuado.
Cepsa se reinventa como Moeve, apostando por la sostenibilidad y la innovación en el sector energético.