¡Noticia bomba! Ayer fue concedido el premio de investigación Swisselectric al científico Dr. Wilf Galtz, quien ha desarrollado un generador termoeléctrico de bajo coste que nos permitirá convertir nuestro propio calor corporal en electricidad. Y no estamos hablando de bajas potencias, porque el doctor nos asegura que incluso podríamos cargar la batería de nuestro teléfono móvil.Este nuevo generador termoeléctrico es diez veces más barato que los que ya habían sido propuestos previamente, ya que el material termoeléctrico esta superpuesto directamente en una cinta de plástico.
Esta revolucionaria tecnología utiliza la diferencia de temperatura entre la fuente de calor y su entorno para generar energía eléctrica, con lo cual no emite ningún tipo de sustancia contaminante. Además, el soporte es muy fino, flexible y puede fijarse incluso en superficies rugosas.
Y eso no es todo, su mantenimiento es totalmente inexistente, ya que no posee partes movibles.Es el invento perfecto que todos estábamos esperando. Podría servir para cargar nuestros pequeños electrodomésticos o para ahorrar energía en nuestros coches, aprovechando las altas temperaturas del propio motor en funcionamiento. Los expertos aseguran que con esta nueva tecnología, podríamos reducir en un 10% de la energía que consumen actualmente nuestros automóviles. Que cada uno lo utilice para lo que mejor le parezca, yo creo que lo emplearé para abaratar la factura de la luz de mi casa, que cada final de mes sobrepasa mis expectativas y me amarga el día.El Dr. Wulf Glatz (que, por cierto, no tiene más de 35 años) ha desarrollado todo el proceso de manufactura de este tipo de dispositivo y está en camino de poseer la patente de su idea y producto. A través de la compañía recién fundada greenTEG GmbH, este exitoso investigador ha decidido traernos su descubrimiento al mercado en menos de dos años. Sólo nos queda armarnos de paciencia y pronto podremos olvidarnos de los dichosos cargadores de baterías y simplemente utilizar esta cinta mientras cogemos la bici para ir a clase o mientras hacemos ejercicio en el gimnasio. Quien quiera podrá mover el cuerpo para recargar la energía de sus electrodomésticos y aquellos que no quieran sudar (o que sean de sangre fría) que paguen. Pero, ya que va a ser nuestro propio cuerpo el que trabajará para poner en funcionamiento esta maravilla científica, sólo esperamos que no nos lo vendan demasiado caro.Os dejamos con un vídeo que demuestra las capacidades de un generador termoeléctrico, para que no creais que os estamos tomando el pelo. Larga vida a la ciencia y, si es libre, barata y ecológica… ¡mejor!Vía
Aunque muchos han usado Google Forms, otros no tienen conocimiento de su uso. Por eso acá explicamos qué es y cómo es su uso adecuado.
Conoce la historia de María José Martí, fundadora de Zero Error y referente en IA.