¿Arte o simple locura? Aún no me decido, pero las imágenes que ha creado Michael Tompert por lo menos son interesantes. Este hombre ha tomado algunos de los productos más populares de Apple y los ha destruido.Con pistolas, martillos, sopletes y serruchos, Tompert arremetió con un iPhone 4, un iPad, varios iPod Nano y un portátil MacBook Air.
Después fotografió los desechos. Su intención es hacer al público reflexionar sobre la dependencia de los consumidores hacia los productos de la manzanita.Paradójicamente, el día de la inauguración de la exposición en San Francisco, California, los hijos de Tompert se sentaron bajo una de sus fotografías a jugar con un iPod Touch.En realidad fue a causa de los niños que nació la idea de esta exposición.
Un día los chicos estaban discutiendo a ver cuál de ellos jugaba con un iPod cuando Tompert intervino y, para demostrarles que era sólo un artefacto desechable, lanzó el dispositivo contra el piso. Obviamente, después debió regalarles otro, pero quedó encantado por las entrañas del reproductor MP3.Tompert, que es un ex empleado de Apple, dice que no tiene problemas con los productos de la manzanita. “Son hermosos hasta por dentro”, ha dicho.La destrucción de los productos AppleVía
