Después de la tormenta llega la calma, excepto para Sony, que podría tener que prepararse para un nuevo ataque a sus servidores por parte de los hackers que ya lograron acceder hasta en dos ocasiones anteriores.En esta ocasión, el plan es entrar una vez más en todos los servidores de la compañía japonesa para publicar todos los archivos que puedan encontrar: usuarios, cuentas de correo, tarjetas de crédito… El objetivo de los intrusos sería hacerse con el control de los datos de la compañía para seguirla hundiendo.Después del primer ataque, Sony acusó directamente al movimiento Anonymous de haber sido los responsables, al encontrar un supuesto fichero incriminatorio en uno de sus servidores.
Fuentes del colectivo afirman que ellos no tienen nada que ver con el robo de datos, y que solo fueron responsables de un primer ataque contra varias webs del grupo por el método DDoS.Lo que sí está claro es que van a por todas, y buscan hundir a Sony en la miseria.
Por lo que imagino que la multinacional debe estar echando cierres extra para evitar que una nueva tormenta eche por tierra los cimientos que quedasen en pie desde el desastre de PlayStation Network.Vía