¡Mira que la gente tiene poca cabeza! El pasado viernes se celebró un mini-evento en Seúl con motivo del lanzamiento del LG G2. En dicha presentación se iba a regalar una unidad del terminal al afortunado que encontrase el vale ganador dentro de los globos de helio que una curiosa máquina se encargaba de lanzar al aire.
Ni cortos ni perezosos, los más ansiosos por conseguir un teléfono gratis se trajeron pistolas de perdigones, de manera que podían hacerse con los vales más fácilmente. ¿El resultado? Más de 20 personas heridas. La compañía se ha disculpado y ha prometido pagar los costes médicos de todas las personas afectadas.
No se puede decir que LG Korea tenga toda la culpa de lo sucedido. Está claro que tendrían que haber tenido ciertas medidas de vigilancia para garantizar la seguridad de los presentes, pero quién iba a imaginar que una parte de los asistentes vendría con una idea tan peligrosa. En cualquier caso, la culpa es de ambos lados, aunque la responsabilidad se la lleva la empresa organizadora, por supuesto. Esta actividad promocional tenía trazado un tour por distintas ciudades coreanas, pero finalmente se ha cancelado. No penséis que solamente los asiáticos se dejan, a veces, el sentido común en casa. En Norteamérica también hemos visto barbaridades parecidas e incluso peores. Basta con recordar ese empleado de Walmart que murió en la avalancha de gente enloquecida por conseguir un televisor HD 32″ a precio de ganga. Estas noticias siempre son tristes, porque estamos hablando de personas convertidas en productos. Tengamos un poco de cabeza, por favor.Vía
