A todos nos pasa de vez en cuando: compras un refresco y no te lo puedes beber al llegar a casa porque no está frío. Algunos supermercados tienen una sección con nevera y bebidas frescas, pero seguro que tampoco soy la única que en alguna ocasión ha recurrido a ella para terminar llevándose una botella que estaba recién colocada —y, por lo tanto, todavía no estaba suficientemente fresca—.
Solemos pagar un plus por este aspecto, pero no siempre satisface al 100%. Esto podría cambiar con la nueva nevera presentada por ingenieros e investigadores europeos. Siendo sinceros, lo cierto es que el proyecto no nace con el propósito de contentar al consumidor, sino con el de ahorrar costes energéticos, pues los grandes refrigeradores gastan una barbaridad.
Por eso la Unión Europea ha financiado esta investigación con 1 millón de euros, haciendo partícipes a equipos de España, Holanda, Reino Unido y Eslovenia. El resultado ha sido fantástico, pues han logrado una nevera que enfría en 45 segundos, lo cual reduce los costes entre un 54 y 80%. La clave es enfriar solo cuando se necesita, y no constantemente. El invento se ha bautizado como RapidCool y el desarrollo corre a cargo de la empresa de tecnología V-Tex. No conocemos muchos detalles de su funcionamiento, pero sí que es automático y que el mecanismo se basa en una agitación y frío intenso. Pero tranquilos, que el líquido no saltará por los aires cuando lo abramos después. La maquinaria de producción ya se ha puesto en marcha, firmando acuerdos con grandes multinacionales. También pretenden lanzar una versión pequeña para los hogares. ¿Qué os parece la idea?Vía
