A principios del año que viene Dell piensa dejar en la calle a más de 900 trabajadores, y es que se ha decidido a cerrar una de sus plantas de manufactura de hardware, situada en Winston-Salem, Carolina del Norte.
Esta es una decisión difícil, especialmente para nuestros compañeros de Carolina del Norte, pero necesaria para los clientes de Dell y para la propia compañía. – Frank Miller (Traducción libre) Además, en Enero traspasará sus operaciones de Irlanda a una planta de Polonia.
Y por si estas noticias fueran pocas, también han decidido vender sus operaciones en Tennesse a GENCO. Hace un par de días publiqué una noticia sobre las actuales maniobras “anti-crisis” de Dell, pero nunca pensé que llegarían tan lejos. La gran compañía de hardware ya cerró un data ceter y se está tomando muy en serio el panorama económico actual. Nos ha quedado claro cuál es ahora su principal objetivo reducir costes, donde sea, cuando sea y como sea. Vía