Sergi Moreu de Uliblet ha ilustrado la situación del dominio .es de España. En el primer año sólo se vendían nombres de dominios relacionados con marcas registradas o acrónimos de su propietario. El volumen de registros era bajo, costoso y lento.
Por esta razón, la mayor parte de las empresas e individuos preferían los dominios .com. En 2003 ha entrado en vigor un nuevo reglamento, creando la extensión de tercer nivel, como com.es u org.es, sin restricciones. En cuanto al segundo nivel, siguió igual que en los años anteriores.
El resultado fue pésimo, con pocos registros de dominios .es, mientras que el tercer nivel fue un tremendo fracaso. En 2005 entró en vigor un nuevo reglamento que ha liberado a los dominios de segundo nivel, exceptuando los nombres de ciudades y términos del gobierno. Los requisitos para el registro fueron los mismos que exigen los .com, concedido el registro a los ciudadanos extranjeros. Este reglamento ha revolucionado el mercado desde la primera transacción de dominio .es que se hizo bajo esta nueva normativa. Hoy en día, los dominios .es registrados ya suman los 1,2 millones, y los registros efectuados desde el extranjero van en aumento. Vía
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