Siguiendo la moda actual entre las corporaciones que pretenden consolidar las nuevas estructuras tecnológicas, el gobierno de los Estados Unidos está planeando una reducción drástica del número de centros de datos operativos en el país, con la intención de que sean mucho más eficientes.
A lo largo de la última década, el número de centros de datos se ha doblado llegando a la espantosa cifra de 1.100 infraestructuras. Cada uno de estos centros consume 6 mil millones de KwH al año. Si no se toman medidas urgentemente para aumentar su eficiencia y ahorrar energía, esta situación podría saltar a los 12 mil millones de kwH en poco tiempo.
La consolidación de los centros de datos beneficiará también a los comerciantes de hardware porque el gobierno invertirá en nuevos servidores y otros equipos para realizar el cambio. De todos modos, no todo serán mejoras con esta iniciativa, porque mientras los centros de datos podrán ahorrar recursos también podrán reducir la plantilla, ya que reducir el número de centros de datos del país norteamericano, significa también eliminar lugares de trabajo. Fotografía