Siguiendo las tendencias actuales de consolidación, el gobierno australiano espera reducir el inventario de sus centros de datos y ahorrarse de este modo más de mil millones de dólares en 2025. Para conseguir cumplir este objetivo, Australia aplicará una estrategia que se divide en tres etapas Esta estrategia consistirá en el retiro de infraestructuras ineficientes y viejas, el uso compartido de tecnologías entre departamentos, y usar equipos más eficientes.
En cuanto al tema tecnológico, las instalaciones públicas pertenecientes al gobierno suelen estar bastante atrasadas, por lo general. De modo que resulta bastante esperanzador ver cómo los políticos de Australia han decidido dar el paso y aprovechar al máximo los avances de hoy en día para reducir costes.
De hecho, la reducción de costes en los centros de datos es uno de los putos claves para el futuro. Fotografía