Abrir un canal de venta en la red es cada vez más un paso esencial para cualquier comercio o empresa.El público está en la red y es por ello que muchas pequeñas y medianas empresas se deciden a dar el paso para ofrecer a sus clientes la posibilidad de adquirir los productos a cualquier hora del día des de cualquier sitio.Pero aunque disponer de una tienda en internet es una buena opción para vender más, vender en línea no es pan comido.Si no se hace bien, siguiendo unas pautas.La inversión que realicemos puede ser para nada y dejarnos peor de lo que estábamos.En el momento de” abrir” una tienda en Internet hay una serie de errores o fallos básicos que conviene evitar.En primer lugar, no hay que intentar ahorrarse algún dinero en el desarrollo del sitio y recurrir a lo más barato del mercado.Si queremos que las personas al otro lado de la pantalla compren en nuestro comercio web, el sitio web debe ser de calidad: buena velocidad de carga del sitio, la apariencia, navegación sencilla e intuitiva, etc.Pero no sólo son importantes los aspectos técnicos del sitio web .Si no ofrecemos diferentes opciones de pago, habrá algunos clientes que opten por adquirir los productos en otra tienda en la que si puedan pagar de la forma que ellos quieren.También hay que dejar bien claros todo lo relativo a los gastos de envío, la política de devoluciones y la atención al cliente.Hay que pensar que cuando un usuario compra por internet es en general más desconfiado y tiene que tener mucha información al abasto para reasegurarse.De no ser así puede ser que perdamos una oportunidad de venta.Por último, hay que tener en cuenta siempre ofrecer una buena información.Si el internauta se encuentra que no se describe el producto, no hay datos sobre sus características diferenciales o las imágenes son malas o inexistentes es improbable que acabe comprando nada.
