El otro día os comenté que durante este Rally de Cataluña estaba teniendo lugar la última fase de la campaña para presidir la FIA. Sólo hay dos candidatos para suceder a Max Mosley: Ari Vatanen y Jean Todt. Seguro que la mayoría de vosotros conocéis a estos dos viejos conocidos del Mundial de Rallys y, sobre todo, del Dakar.
En la foto de arriba y en la galería podéis ver momentos de estos dos señores juntos durante los años 80 en la Subida al Pikes Peak.Lo que muchos no saben es qué representan, qué quieren hacer si llegan a presidentes y, lo más importante, quién está detrás de cada uno de ellos.
No os engañéis, aquí el resultado de los comicios se sabe mejor que el de la elección de la próxima ciudad olímpica, el próximo presidente de la FIA se llama Jean Todt. Al francés le apoyan todas las principales federaciones europeas y del resto del mundo. Quizá por esa razón, Ari Vatanen ha optado por un programa para acercarse a los países emergentes. Si gana el finlandés habrá pruebas del Mundial de Rallys en varios países de Asia, África y alguno más de América Latina. Jean Todt y Ari VatanenDe segundo de la lista de Vatanen está Fernando Falco y Fernandez de Cordova, marqués de Cubas, que en nuestro país forma parte del Consejo de Estado para la Seguridad Vial entre otras asociaciones. Él y Hermann Tomczyk, padre del piloto alemán del Mundial de Turismos Martin Tomczyk son quizá los únicos representantes de primeros países en esto del motor dentro de la lista de Vatanen.Del lado de Todt están el resto, literalmente, empezando por su predecesor y terminando por Bernie Ecclestone, el dueño de la F1. No se puede decir que el del francés será una periodo de continuismo porque ya ha anunciado que reducirá el papel del Presidente para hacer de la FIA una asociación más transparente. No le queda otra después de todos los líos que ha habido estos años.A mí, personalmente, me huele mal que todos los que han estado detrás de los tejemanejes de la F1 y del WRC en los últimos años apoyen sin fisuras a uno de los candidatos. Seguramente, sobre Ari Vatenen pesen demasiado declaraciones como “si llego a presidir la FIA, ese organismo ya nunca volverá a ser lo que es ahora”. Ya podía haberse esperado a después del 23 de octubre para decir estas cosas.
