Durante una conferencia telefónica celebrada este pasado fin de semana, Nick Reilly, presidente de General Motors Europa, ha admitido que la firma automovilística Opel seguirá registrando pérdidas el próximo año, por lo que la compañía necesitará apoyo de los Gobiernos de países con en los que tiene presencia para continuar con sus operaciones.Reilly, aseguró que General Motors necesita 3.300 millones de euros para su filial europea Opel, y precisó que, de este montante, 1.000 millones corresponderán a la reestructuración de la empresa.
El resto se destinará a la inversión en nuevos productos. Y es aquí, en la renovación de la gama de modelos Opel, donde Nick Reilly dio la noticia, y es que aseguró que la principal prioridad de la marca es el lanzamiento de un automóvil correspondiente al segmento mini car y un eléctrico.
Respecto a la llegada de un coche compacto, Opel quiere competir en el segmento con el Ford Ka y el grupo Volkswagen, con lo que está decidido a ampliar su gama con otro vehículo mini. Recordemos que en 2004, Opel ya presentó en el Auto Show de Ginebra el concepto de minicoche Opel Trixx, un 3 +1 plazas que nunca entró en producción ya que GM decidió meter en este segmento al Chevrolet Spark. Ahoro podría ser su momento.PUBLICIDADPUBLICIDADEn cuanto al vehículo eléctrico, reveló que cuando el Opel Ampera llegue al mercado en 2011, se importará inicialmente a Europa desde Estados Unidos, pero también se fabricará a posteriori en el Viejo Continente, siendo la planta británica de Ellesmere Port una de las candidatas con más posibilidades de albergar su producción.Vía