La filial de BMW Mini ha iniciado los estudios y las planificaciones como parte de un programa con el que pretenden potenciar sus ventas mediante la inclusión en su portafolio de modelos más asequibles.
Dentro de esa gama de entrada con acabados inferiores a los habituales se encontraría el futuro rival del Smart ForTwo, que servirá de complemento al Megacity de la compañía madre.
El nuevo modelo utilizará tecnología convencional y una estructura de plataforma y componentes mecánicos modular que viene siendo habitual en la marca germana, la cual ayudará a mantener los costes de desarrollo bajos y facilitaría la adquisición de objetivos económicos.
Hasta ahora Mini había comentado que un modelo inferior al Mini Cooper no sería rentable a largo plazo, pero con la ayuda de BMW la situación es distinta.
Es bien sabido que BMW introducirá un nuevo Serie 1 de bajo coste y tracción delantera, además de tener el proyecto Megacity entre manos, por lo que deberá investigar nuevas técnicas de producción e introducirá los motores de tres cilindros a su gama.
Todos estos elementos serán los que facilitarán a Mini el desarrollo del pequeño city car con la confianza en que el proyecto será rentable.
Mini no ha dado ninguna información acerca de si su futuro city car será de 2 o de 4 plazas ni tampoco si el motor estará situado en la parte frontal o en la trasera del automóvil.
Según se dice podría tener una longitud no mayor a 3050mm, lo mismo que medía el primer prototipo del Mini, unos 700mm más corto que la versión final y 300mm más largo que el Smart ForTwo.
Los primeros bocetos del nuevo citycar se están desarrollando en Munich, aunque desde Los Ángeles la filial diseñadora de BMW DesignWorks también colabora en algunos aspectos del que denominan internamente con el nombre clave ‘Minor’.
Mini deberá apresurarse, pues Smart ha anunciado la nueva generación del ForTwo en colaboración con Renault para 2014.
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