Sin duda uno de los eventos más seguidos y destacado, sobre todo por la prensa rosa, de este pasado fin de semana fue la boda real sueca entre Victoria de Suecia y Daniel Westling, su entrenador personal.
Esto poco o nada tendría que ver con el mundo del motor.
Si no fuera porque Volvo estuvo presente en el acto.
La firma automovilística sueca, como no, no se quiso perder un evento de tal magnitud .
Y es que la futura heredera de Suecia tenía la intención de organizar algo así como ‘’una boda ecológica’’, para lo que llevó a los invitados en un autobús hasta la catedral de San Nicolás.
Y en este entorno tan ecológico Volvo no quiso perder la ocasión de dejarse ver.
Y para ello, la marca personalizó y cedió 85 unidades de su modelo Volvo S80 que sirvieron como transporte para algunos de los alrededor de 1.
200 invitados a la boda del año durante los días previos al evento.
Una vez finalizados los festejos, al haber sido sólo una cesión, los coches saldrán al mercado con un precio que todavía no se conoce.
Volvo en la boda real suecaY es que el sedán Volvo S80 se adaptaba perfectamente a las intenciones de un acto ecológico y respetuoso con el medio ambiente, pues se trata de un modelo que emite menos de 120 gramos de CO2 a la atmósfera por cada kilómetro recorrido.
Los 85 Volvo S80 personalizados eran, como no podía ser de otra manera, de color blanco tanto la carrocería como el interior, con el interior tapizado en cuero con el emblema de la boda tanto en los laterales como en los reposacabezas.
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