Hace unos meses os conté que GM estaba colaborando con la NASA en el desarrollo de un humanoide capaz de realizar toda clase de tareas en el interior de la Estación Espacial Internacional (ISS).
El robot, denominado Robonaut 2 (R2) quizá en honor al simpático personaje de la Guerra de las Galaxias, deberá ser enviado allí a finales de este año por medio del trasbordador Discovery.
Aunque antes, R2 está pasando una serie de pruebas.
En las imágenes de abajo, podéis comprobar cómo este GM espacial está siendo sometido a exámenes muy similares a los que pasan los coches antes de ser comercializados, como el de contaminación acústica o el de compatibilidad electromagnética.
Al igual que cualquier otro dispositivo electrónico, R2 puede generar interferencias en los aparatos que le rodean y, en una nave espacial, toda precaución de este estilo es poca como podéis imaginaros.
Robonaut 2 (R2)Estos días, los ingenieros de GM y de la NASA se encuentran reunidos en el Johnson Space Center de Houston (Texas) para poner en común todos sus resultados.
En GM ya han anunciado que piensan utilizar muchos de los conocimientos que han adquirido en este trabajo en sus futuros modelos, las aplicaciones se centrarán sobre todo en nuevos y más efectivos sensores que aumenten la seguridad.
Desde que se iniciara este proyecto, en 2007, GM lleva registradas 34 patentes producto de esta investigación.
Algunas de las soluciones en las que ya trabaja la firma para poder aprovecharlas serían nuevos sistemas de aviso de cambio de carril o de vehículo en el ángulo ciego.
De momento, no se han planteado meter a uno de estos R2 detrás del salpicadero para que podamos olvidarnos de conducir en los atascos.
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