No resulta divertido publicar este tipo de cosas, sin embargo, resultan de mucha utilidad para representar gráficamente las consecuencias del exceso de velocidad en carretera, especialmente en verano cuando se realizan muchos desplazamientos.
Es el caso de Brennan S.
Eden, quien sufrió un increíble accidente en Ohio, Estados Unidos.
Por cosas de la vida, el accidente fue registrado por una cámara en el salpicadero de una patrulla de la policía de carretera del condado de Sugarcreek, punto exacto del suceso.
El patrullero y los coches que le precedían viajaban a unas 65 mph o 105 km/h, de repente, aparece un Pontiac Firebird a más de 160 km/h que se mete por la zona central de la carretera a la izquierda de la patrulla y ocurre el desastre.
Tras rodar por unos 10-15 metros por el cesped, el Pontiac coge una especie de loma y sale proyectado hacia los pilares del puente que estaba justo delante, el resultado, el coche terminaba partido en tres parte y el conductor, Brennan S.
Eden de 19 años salía despedido hacia el asfalto quedando a punto de ser arrollado por los coches que se desplazaban en ese instante por la Interestatal 675 de Ohio.
Un Mustang que viajaba justo delante de la patrulla fue testigo de todo lo acontecido y frenó a sólo 5 metros de Brennan que había terminado inconsciente en la calzada del carril lento.
El joven conductor sobrevivió al espantoso accidente pero se encuentra ingresado en estado crítico, nadie más resultaría herido.
Una muestra de cómo la insensatez y el volante no son buenos compañeros, os dejo dos vídeos para que detalléis lo sucedido.
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