×

Un sujeto acabó con la vida de la madre de su compañera sentimental

En una charla reciente ante la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York, el líder del gobierno español, Pedro Sánchez, expresó su inquietud por los sucesos en Venezuela tras las votaciones del 28 de julio. Aseguró que España mantendrá firme su compromiso con la democracia y con la salvaguarda de los Derechos Humanos.

En esa línea, censuró cualquier aprisionamiento o intimidación a los políticos, apoyando el respeto al deseo del pueblo venezolano, la claridad y la validación de los resultados electorales.

En su discurso, repasó varias problemáticas internacionales, destacó el papel del proyecto europeo como «modelo de esperanza», alertó acerca de la vulnerabilidad y el «peligro real de regresión» de la democracia e hizo hincapié en la necesidad de promover la agenda del desarrollo sostenible, entre otros temas.

En cuanto a los conflictos globales y los países involucrados en guerras extranjeras, Sánchez señaló que estas son evidencia de una «enfermedad global que está debilitando los cimientos del sistema multilateral». Hablando primero sobre el conflicto en Ucrania, anunció que España proporcionará más ayuda financiera y desminado en Ucrania, incrementando la cantidad a 14 millones de euros.
Advirtió que en 2025, la ayuda española incluirá un enfoque específico en la recuperación y reconstrucción, centrado en salud, energía y agua.

Acto seguido, mencionó la grave crisis en Palestina, condenando «enérgicamente» la pérdida de vidas inocentes e instando a una desescalada, relajación y recurso a la diplomacia. Subrayó la urgencia de aplicar la «solución de los dos Estados» para Israel y Palestina.

El presidente ha defendido proyectos como el europeo dentro del actual escenario tumultuoso, describiéndolos como «un rayo de esperanza». Él señaló cómo el enfoque geopolítico en Europa ha sufrido una transformación impresionante en unas pocas décadas. Sin embargo, frente a una «agenda reaccionaria global» que se alimenta de la desconfianza institucional, la polarización y la reivindicación de un pasado inventado, Sánchez alega que la democracia está luchando por sobrevivir contra aquellos sin ética. El presidente instó a la construcción de una barrera para salvaguardar las instituciones democráticas contra los que intentan socavarlas. También enfatizó en la necesidad de reconocer los errores, trabajar en su regeneración interna, fortalecer la transparencia, responsabilidad, y acercar la democracia a los ciudadanos, haciéndolos sentir parte activa.

Sánchez también ha abogado por la alternancia de género en la Presidencia de la Asamblea de las Naciones Unidas, calificando la actual situación como «simplemente inaceptable». Además, expresó su apoyo para movilizar más recursos para ayudar a través de políticas fiscales «más eficientes, transparentes y justas». Finalmente, identificó a África como un «destino prioritario para España», convirtiéndose en un socio esencial.

«Es momento para que África se posicione donde merece, y ese es el motor que dirige nuestra estrategia para este continente», ha declarado. Es por esta razón que Sánchez ha enfatizado la importancia de consolidar las relaciones con los países de esta región, reconociendo que la riqueza, la seguridad y el desarrollo están «firmemente ligados al avance inclusivo» del continente africano.

Lea También