Robinho, el exjugador de fútbol de Brasil, quedará en la cárcel, según una decisión reciente del Tribunal Supremo de Brasil. Este fallo fue emitido luego de que Robinho pidiera salir en libertad tras ser encarcelado desde marzo por un veredicto de violación.
Sin embargo, el juez Luiz Fux, encargado del caso, se opuso a esto, argumentando que no había violación de las leyes constitucionales en la orden de encarcelamiento de Robinho, tal como afirmaba su defensa. Esta defensa incluía su historial como jugador en equipos como Real Madrid, Milan y Manchester City.
El juicio fue suspendido de inmediato después de la solicitud de un segundo magistrado para repasar el caso, sin contar con una fecha establecida para revisar nuevamente la situación. Robinho fue encarcelado en São Paulo el 22 de marzo, tras aprobación de una sentencia de nueve años impuesta por un tribunal italiano por un crimen de violación colectiva realizado en 2013.
Los abogados de Robinho presentaron un ‘habeas corpus’ para liberar a su cliente hasta que el Tribunal Supremo tome una decisión final sobre si la sentencia italiana puede ejecutarse en Brasil. La defensa sostiene que Robinho, de 40 años, todavía tiene derecho a apelar ante tribunales superiores, por lo que su sentencia no se puede considerar definitiva aún. Había sido condenado en Italia en 2017, pero volvió a Brasil antes de que termine el juicio, ya que la constitución brasileña prohíbe la extradición de sus ciudadanos. Las autoridades italianas pidieron a Brasil que validen la sentencia y que procedan a encarcelar al exfutbolista en su país natal para cumplir su sentencia.
Luego del fallo del Superior Tribunal de Justicia que validó su sentencia, Robinho fue trasladado a la prisión de Tremembé, ubicada en la zona rural del estado de Sao Paulo.
